Madurez Escolar.... una propuesta de evaluación

Bienvenidos... compartimos una pasión, la educación infantil y su desarrollo



sábado, 23 de febrero de 2013

Reciprocidad Infantil...

La Reciprocidad Infantil, reside en una clara relación entre el niño, su contexto y un número de variantes importantes, ya que los recursos de aprendizaje mas valiosos, son las otras personas. Un aprendiz efectivo, necesita sentirse confiado e inclinado a dar opiniones  a través de cualquier rango comunicativo o expresivo.
 
El niño que es capaz de comunicar sus ideas y escuchar las de sus amigos, al momento de un juego, de estar en clases o de conversar,  tiene el aprendizaje garantizado, ya que el poder establecer esta relación, hace que se amplíe su universo, muy reducido , por lo egocéntrico de su pensamiento, propio del momento evolutivo de los primeros años.
 
Quienes han hablado del aprendizaje (Vygotsky, 1978; Lave y Wenger, 1991, Bruner, 1996 y Cole, 1996) demuestran que se inicia en el contexto de interacción entre las personas y que las restricciones, en estas disposiciones para interactuar con otros, limita a los niños, a la inmersión en nuevas estrategias de aprendizaje y actitudes positivas a su alrededor y desempeño educativo.
 
En  mi consulta psicopedagógica, incluyo la terapia grupal, aun cuando el aprendizaje es particular y por iniciativa del niño, porque la experiencia me ha enseñado que prospera en contextos de relaciones recíprocas y receptivas con otros, sin embargo, se requieren destrezas y habilidades para hacerlo, de la misma manera se debe considerar la atención conjunta, la participación y el tomar en cuenta las opiniones y necesidades del otro. Para mí es importante, enseñarle a manejar el estímulo distractor y no eliminarlo.

Expresar sus ideas, incertidumbres, preguntar, asumir roles durante el juego en equipo y tomar en cuenta los propósitos y perspectivas de los otros, son vías de consolidación a la MADUREZ que el niño requiere, para enfrentar con éxito las tareas sociales, convencionales y particulares, que le son exigidas en su desempeño escolar.
           

          

sábado, 16 de febrero de 2013

Somos pediatras en salud mental...

Preescolar, es el sistema de educación que alberga los niños desde los 0 hasta los 6 años, organizados en dos etapas: maternal (0 a 2 años) y preescolar (3 a 5-6 años), es una etapa educativa no obligatoria, mas si necesaria, puesto que es donde se adquieren y desarrollan los aprestamientos básicos para la adquisición de la lecto-escritura y el cálculo, por lo que exige que su personal sea formado profesionalmente, con estudios superiores, y lo mas importante, exige mucha vocación para el desempeño de las labores y compromisos inherentes.

Fröbel, Pestalozzi, Montesori y Declory, son nombres conocidos por todos los profesionales que laboramos en un preescolar, puesto que ellos, con su propuesta pedagógica y sistemática, definen los lineamientos a seguir durante esta etapa educativa, que se ha mantenido a través de los años, con las adaptaciones curriculares propias de cada país y contexto cultural.
 
El psicólogo del preescolar, es como el pediatra de la salud mental, que está altamente involucrado en todos los procesos dados en la institución educativa y sus capacitación debe incluir todas las aristas de la psicología, en virtud de la atención temprana de las diferentes áreas del desarrollo que se estimulan durante esta etapa hasta consolidar su MADUREZ.
 
Es el encargado de difinir las necesidades globales e individuales de cada uno de los alumnos y sugiere las medidas de intervención, prevención, detección y evaluación, según las demandas propias, potencialidades y capacidades que dejan ver y que se deben estimular en este período. Es importante un mirada integral del niño, para contribuir al desarrollo de sus habilidades cognitivas y de aprendizaje y la implementación de programas preventivos favorecedores de la salud, las competencias socio-afectivas y la adaptación.

De igual manera, asesora y colabora con el equipo directivo y docente en la elaboración de los proyectos, especialmente aquellos que involucren planes especiales en atención a la diversidad. Participa en la selección del personal, promueve la formación contínua y ayuda a establecer buenas relaciones interpersonales, para llevar a cabo el trabajo de forma satisfactoria, creando espacios para la negociación y el consenso, siempre con la vista puesta al mejor programa de desarrollo escolar.
  
El apoyo a las familias es otra de sus virtudes en esta amplio campo de acción en esta etapa educativa, porque la Atención Temprana ayuda a prevenir, las desigualdades que se evidencian justamente en este período del niño. La relación entre familia y escuela, se debe fortalecer y velar por el desarrollo de los procesos evolutivos que marcaran la pauta del ritmo biológico, que facilitará el camino hacia el éxito escolar y personal, a futuro.

Los padres deben encontrar ese pediatra en salud mental, que promueve y colabora en las adquisiciones oportunas de los hitos del desarrollo de las edades tempranas, para ello hay que establecer claramente el plan y las medidas a tomar, que le permitan comprender la propuesta orientadas a atender los aspectos básicos del programa formativo.
 
Socialmente, el psicólogo del preescolar, contribuye a la mejora en las condiciones educativas de las instituciones, especialmente al escolarizar niños y niñas con necesidades educativas diferentes, por condiciones orgánicas de discapacidad o por situación social desfavorable. Los principios de integación y normalización, deben proporcionar la atención adecuada tan pronto sean detectadas y confirmadas en la evaluación, dando respuesta a las necesidades de los niños, familiares, escuela y sociedad.

Somos promotores y vigilantes del desarrollo, y debemos ofertar nuestro trabajo profesional desde la prevención, y no dejarlo para únicamente la intervención posterior.

sábado, 9 de febrero de 2013

Actitud...

La MADUREZ es un contructo de interés para la psicología, por la secuencia natural de cambios biológicos, físicos y conductuales que despliega, que nos preparan para el dominio de nuevas habilidades.
 
Va de la mano con la DISPOSICIÓN AL APRENDIZAJE, como la tendencia y alerta a querer hacer algo, con interpretaciones propias de las experiencias (Carr, 202) o la inclinaciones que nos guían en una dirección u otra, dentro de la libertad de acción de cada persona (Perkins, 2002).
 
Otro factor que interviene es esta madurez es la ACTITUD, como la postura que se adopta y es expresada de un modo particular por cada ser humano, en su motivación socio-personal y predisposición hacia el logro de sus metas u objetivos, dependiendo de la experiencia y relaciones que se hayan acumulado, a lo largo de la vida.
 
En mi trabajo diario con los niños, que definitivamente, son los grandes maestros de mi vida, estos conceptos, se sienten y su interpretación cobra vida, especialmente el de la actitud. Hay normas sociales y familiares convencionales que deben cumplirse al pie de la letra, hay otras en las que se puede flexibilizar y dejar que la espontaneidad del niño, marque la pauta, evitando exigencias ilógicas, que lejos de ayudar a estructurar el momento, lo obligan, provocando el rechazo a lo que está haciendo y la frustración por no cumplir con lo esperado.
 
Cuando se mantiene la perspectiva de que cada niño es un universo de potencialidades, capacidades, personalidad y temperamento, el éxito está garantizado, porque nos convertimos en mediadores y acompañantes del proceso educativo, no en sus caudillos.
 
El reto escolar para los niños, es muy exigente y hay que ver las miles estrategias que se ingenian, para cumplir las expectativas y consolidar los contenidos que deben aprender. Por ello el dejarlos ser y actuar, es una premisa a considerar en su quehacer diario. Respetar y aceptar  sus ocurrencias, hace mas ligero el día a día en la ecuela.
 
PD: la de la foto es Marissa, (con la debida autorización de su madre) una niña con Síndrome de Madelung, que debe vencer la norma convencional de la escritura, en cuanto al agarre prensil y la posición del cuaderno ya definida dentro de la "normalidad", y hay que ver de qué manera lo está logrando, pura ACTITUD.
 
 

sábado, 2 de febrero de 2013

Sin dejarlo pasar...

 
Las verbalizaciones de mis niños y frases como las que les comento mas adelante, me llevan a reflexionar, lo lógico y egocéntrico del pensamiento en la primeras edades, aunque la flexibilidad y la reversibilidad vayan encontrando espacio en este pensamiento, y le permitan al niño percibir diferencias mediante los procesos de adaptación -- asimilación -- acomodación (Piaget e Inhelder, 1978).
 
Diego de 5 años, en una conversación realmente seria, le preguntó a su mamá con mucha entereza,  "¿Qué quiere decir coño?... es una palabra igual... por qué es grosería?, de inicio se quedó sin respuesta... yo tampoco la tengo, al igual que muchos de ustedes... Sólo es una muestra de lo concreto del lenguaje a esta edad, que sólo tienen significado aquellas palabras que pueden tener una representación gráfica, por ejemplo casa, carro, árbol, entre muchas... Diego la repite, y hasta le da la entonación adecuada según sea el contexto, mas para él es difícil entender por qué a ellos (los niños) no se les permite repetirla o ese concepto "palabra grosera" que aún no tiene significado para él... entonces, a esta edad, sin símbolo la palabra, tiene poco sentido, la connotación "mala palabra" se la damos los adultos y nutrimos su suspicacia cuando les llamamos la atención o prohibimos el que la digan, en vez de educarlo y explicarle.
 
Estás segura que tu eres una adulta?, me preguntó Santiago, (4 años), igualmente en su pensamiento lógico-real, sólo los que son grandes son adultos y yo apenos mido 1.43, lo que puede medir un niño de 10 años... en este mi caso, esa variante de que el tamaño no va en relación con la edad, para el tampoco es posible, solo cuenta con un pensamiento concreto y transductivo, que aún no le permite aceptar, diferencias entre las generalizaciones.
 
Sabes que mi hermanito, tiene los mismos apellidos que yo? me contaba Victoria (5 años) como el gran descubrimiento, y es así, ellos construyen su propio aprendizaje, partiendo de las experiencias personales del día a día, y llegan sus propias conclusiones, justamente lo que Ausbel llama Aprendizaje Significativo, el que nunca olvidarán, porque para ellos tiene sentido y es de verdad.
 
Entre los 4 y 5 años, muchas de las habilidades lingüísticas, cognitivas y perceptuales de los niños, MADURAN y le permiten, un aprendizaje mas eficaz. A su vez se inicia la inferencia lógica y de relaciones causales, que depende de las cosas concretas cercanas a su experiencia que son muy pertinentes con la edad escolar.
 
Es el momento de dejarlos que descubran el mundo, aunque digan "groserías" y construyan su propia vida, nosotros los adultos (puede que pequeños de tamaño) somos sus acompañantes y mediadores de este caminar hasta que nos necesiten, luego nosotros necesitaremos de ellos...
 
 
 

Invitación...

 
Desde el año 2007, trabajo en el ambicioso proyecto de diseñar y validar un instrumento de evaluación psicológica, de medición cuantitativa para el constructo Madurez Escolar, tan necesario en estos tiempo, donde los índices de deserción son cada vez mas alarmantes y la remisión a la psicología clínica infantil ha aumentado con diagnósticos y percepciones erradas, que tienen mas que ver con la maduración, que con cualquier otra condición orgánica del niño en edad preescolar y escolar.
 
El estudio piloto (2007) sirvió como la propuesta inicial, que luego por sugerencia de quienes lo conocen y consideran que es un buen instrumento se llevó a su primera revisión (2010 - 2012) con ciertos cambios pertinentes que lo enriquecieron y facilitaron su aplicación, así como la realización de un diseño mas atractivo.
 
Lleva el nombre de Batería porque combina 3 instrumentos para su aplicación:
1) Secuencias de Madurez Escolar en la áreas física y motora, cognitiva, académica y lenguaje.
2) Dibujo de la Figura Humana (Koppitz, 1976) con su debido ajuste psicométrico de los indicadores evolutivos, hasta ahora en el estado Zulia.
3) Escala Disposición al Aprendizaje en dos versiones, padres (Semprún, 2012) y maestros (Mandrillo y Villalobos, 2009), que cubre el área socio-emocional del niño en esta propuesta de evaluación.
 
Los tres en conjunto, brindan un perspectiva multidimensional de evaluación clínica infantil y su aplicación escolar.
 
La invitación es a formar parte de un gran equipo nacional, a fín de recoger datos que servirán para robustecer las propiedades psicométricas del mismo y se inicie la aplicación clínica y escolar, apoyados en un instrumento diseñado y validado en contexto nacional, del cual carecemos.
 
La dinámica que planteo es trasladarme hasta tu ciudad, donde tú te encargarías de ubicar un número suficiente de psicólogos clínicos y escolares interesados en el constructo Madurez Escolar, para darles a conocer la propuesta de evaluación (sin costo alguno), luego se formaría el equipo interesado en el entrenamiento de aplicación, registro y presentación de resultados de la BME-R (esto si con un costo mínimo que cubra el material ya impreso) y se de inicio a las aplicaciones, que luego me harán llegar sus protocolos (con una fecha tope) para llenar la base de datos y proceder al análisis estadístico pertinente hasta hacer de éste, un instrumento realmente válido y confiable, en miras de obtener la muestra reglamentaria para posteriormente establecer sus normas.
 
Estoy segura de que esto se pueda logar, y para ello confío en Uds.
 
Sin mas, y en espera de pronta y afirmativa respuesta
Psic. Karleana M. Semprún
Coordinadora Línea de Investigación en Madurez Escolar
Uru - 2013
 
 
PD: UNA TORTUGA FELIZ NUNCA SE ESCONDE (Joel, 5 años), es el lema que me motiva a hacer este trabajo, por eso lo comparto con Uds. Esta no es la Tortuga Feliz oficial de mi investigación (está guardada para el final), es una que me regalaron... se los dejo como adelanto y que igualmente a ustedes les sirva de motivante para participar...