Reflexionando sobre la celebración de este día reafirmé mi pasión por ser MAESTRA...
en ningún otro trabajo me harían fotografías casi que a diario, tampoco me recibirán con los brazos abiertos al ausentarme por algunos días...
es fácil olvidarme de mi y de mis preocupaciones para atender el llanto de mis chiquillos...
llevar la mano y enseñar las letras a quien el día de mañana posiblemente escriba un libro, o me asista en una sala de emrgencias, o me asesore ante un asunto legal o hasta diseñe mi casa, me plena e invita a continuar adelante...
cada día recibo flores... las mas chiquitas, las que no se compran y que se cortan mientras caminan hasta llegar a la sala...
cada día limpio mocos y culitos porque aún su motricidad no se los permite...
apuestos jovencitos me proponen empate y me cuentan sus mas reales fantasías...
lo único que me hace llorar es que cada año debo despedirme de ellos y esperar a que la vida nos permita volver a vernos...
SOY MAESTRA Y LO DISFRUTO...
No hay comentarios:
Publicar un comentario