Ayer sábado, tuve el inmenso honor de iniciar, junto con un grupo de psicólogas comprometidas con la práctica psicológica escolar, la primera Certificación en Madurez Escolar Integral (MEI).
La experiencia no puedo describirla menos que muy gratificante y de re-afirmación de un compromiso para con los niños y niñas venezolanos...
Es un proyecto que inicié hace aproximadamente siete años, durante los cuales he contado con el apoyo y colaboración de muchos colegas psicólogos, estudiantes de psicología, maestros, padres, representantes y niños, porque sin su activa participación no hubiese llegado hasta aquí.
El objetivo principal de la certificación, es formar en el conocimiento teórico y aplicación del instrumento que encierra el constructo Madurez Escolar Integral, desde una perspectiva multidimensional (Panter y Bracken, 1995) y secuenciada (León, 2003, 2012) para la evaluación de seis áreas del desarrollo específicas, vista desde los aspectos mas relacionados con la escolaridad.
Este inicio fue de arduo trabajo, de planificación, de constantes revisiones del material a entregar, de estudio y de entrega, para dar lo mejor de mí y responder a las expectativas planteadas por los participantes. Ahora las muestras de afecto y felicitación están presentes... eso me gusta y me anima a seguir, con la convicción de que lo que estoy haciendo es importante y por eso deseo que mucha gente lo conozca...
Nos faltan dos sábados mas de trabajo intenso, aquí en Maracaibo para luego diseminar esta semilla formativa en otros estados, donde ya están ansiosos por participar y hacerse multiplicadores de un Modelo Escolar que puede ser de gran beneficio para la evaluación, diagnóstico e intervención de los niños y niñas venezolanos, porque Una Tortuga Feliz, nunca se esconde.
Gracias!
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