A la par de la percepción visual, otro tipo de percepción importante es la auditiva, como la capacidad para percibir, reconocer y diferenciar diversos estímulos, a través del oído, semejantes o diferentes entre sí, sintetizarlos y ser capaces de
asociar este sonido, a una imagen visual.
La escuela debe considerar que la percepción auditiva, está
relacionada con niveles mayores de abstracción, ya que todo el procesamiento
del lenguaje oral es puramente simbólico, y sin imágenes visuales las palabras
más sencillas, son símbolos complejos. Las letras son grafías, dibujos, que se acompañan de un sonido o fonema, que le dan la utilidad lingüística para poder comunicarnos, verbalmente o por escrito.
Si no se desarrolla esta capacidad, el niño tendrá dificultad para entender lo que se le dice y poder expresar lo que desea, así, resulta indispensable que el niño adquiera la habilidad de reconocer sonidos para poder leerlos o reproducirlos.
Si no se desarrolla esta capacidad, el niño tendrá dificultad para entender lo que se le dice y poder expresar lo que desea, así, resulta indispensable que el niño adquiera la habilidad de reconocer sonidos para poder leerlos o reproducirlos.
Los niños con
débil percepción auditiva, confunden letras de sonidos semejantes, tanto al leer
como al escribir. Igualmente tienen dificultad para separar palabras en sílabas
y deletrear. Incluyen transposiciones y tienen dificultad para discriminar
sonidos compuestos (que incluyen dos consonantes). En matemáticas las dificultades
se dan en el cálculo mental, cuando las instrucciones se dan verbalmente, ya
que pueden producirse los mismos problemas de la lectura por la confusión de
sonidos semejantes.
Por ello, atender la expresión y la comprensión, del lenguaje, descartando dificultades auditivas, desde las edades mas tempranas, ayudarán a prevenir, dificultades mayores en la adquisición y consolidación de la lecto-escritura y el cálculo.
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