Madurez Escolar.... una propuesta de evaluación

Bienvenidos... compartimos una pasión, la educación infantil y su desarrollo



domingo, 21 de abril de 2013

Insisto...


     La evaluación psicológica escolar del niño, se apoya mayormente en instrumentos de despistaje de los aprestamientos, basados en su poder predictivo sobre el rendimiento en lecto-escritura y cálculo, mas que en otras áreas de su desarrollo integral.


     Los instrumentos mas usados, varían respecto a la amplitud del constructo evaluado, el número de ítemes y sub-pruebas relacionadas entre sí, la diversidad en las tareas elegidas y el modo de administrarlas. 

     Entre los muchos instrumentos  se encuentran: Test ABC (Filho, 1960); Pruebas de Madurez Escolar de Irasek (Cabrera, Aguilar y Betancourt, 1986); Batería de Inizan (1989) y los Test de Madurez Escolar del Instituto Gesell (Ilg, Ames, Haines y Gillespe, 1981) que abordan el constructo madurez como aprestamiento de habilidades académicas.

     Insisto, que para evaluar al niño, no es lo único... insisto que lo académico no es consecuencia absoluta de lo cognitivo... insisto en que el niño, es una integridad y como tal debe evaluarse, sobre todo para tomar decisiones tan importantes, como es la respuesta escolar, con éxito y sin esfuerzo. Muchas son las habilidades relacionadas con las actividades académicas del niño, que incluyen el dominio de conceptos, el procesamiento de información auditiva, visomotora y corporal, su razonamiento y comprensión lingüística, habilidades sociales y motoras, y en un rango mas definido, la conciencia fonológica y el conocimiento de las letras y los números. 

     En mi interés por proponer un modelo en evaluación de Madurez Escolar, con su respectivo instrumento de evaluación, clínica y escolar, realizamos (Semprún, Guédez y Medina, 2013) la Validez Convergente del instrumento que propongo "Batería de Madurez Escolar - Revisada" (BME-R) con el Test ABC y el Test 5-6, ambos respetables y sólidamente psicométricos en los países donde fueron creados. Los resultados evidencian que los tres miden el mismo constructo: la dirección es directamente proporcional entre la BME-R y Test ABC y el 5-6; la magnitud se describe baja para 5-6 y moderada para ABC con alta significancia con ABC y nula para 5-6, lo que lleva a pensar que se mide el constructo de manera diferente, y ese es mi aporte...

     La Madurez Escolar, debe medirse desde una perspectiva multidimensional (Panter y Bracken, 1995), considerando diferentes áreas del desarrollo del niño y no lo meramente académico.

2 comentarios:

  1. Cual es el mejor momento para aplicar la prueb? Si los resultados son desfavorables, cual sería la intervención?

    ResponderEliminar
  2. La prueba incluye desde los 3 hasta los 8 años, el único requisito indispensable es que el niño esté escolarizado, ya que hay habilidades que se miden, son netamente académicas. En caso de que el perfil se muestre con la mayoría de las competencias por debajo a su edad, la intervención estaría apoyado en un programa psicoeducativo, familia , escuela y comunidad que estimule las áreas en debilidad y fortalezca las consolidadas.

    ResponderEliminar